"Sustentabilidad: reto de la industria del plástico”: Arturo Nava

Reunir a las empresas relacionadas con la transformación del plástico, fomentar la generación de negocios y compartir buenas prácticas mientras se mantiene un alto compromiso y responsabilidad social, es decir, cumplir cabalmente con la misión del Clúster de Plásticos de Querétaro, no es una tarea sencilla. Y encabezar este esfuerzo, como lo hace Arturo Nava Guerrero, es un verdadero desafío.

Innovador, propositivo y siembre ávido de aprendizaje, la historia personal y profesional de Arturo Nava está llena de interesantes retos y anécdotas y, naturalmente, de un elemento común: los plásticos. Lo invitamos a conocer algunas claves de la industria plástica queretana y cómo se forjó este líder y exitoso empresario.

Elastómeros de Querétaro: casa y escuela

Arturo Nava Guerrero es, desde hace 16 años, Plant General Manager en Elastómeros de Querétaro, una empresa dedicada a la fabricación de compuestos, extrusión, compresión, inyección, mecanizado, troquelado, ensamble y acabados de partes de silicón y otros polímeros orgánicos y sintéticos, que atiende principalmente a los sectores aeroespacial, automotriz y de electrodomésticos.

No es una expresión decir que Arturo conoce a la compañía como la palma de su mano, pues forma parte de la tercera generación de esta empresa familiar en la que, desde muy temprana edad, aprendió a “hacer industria” y tuvo su primer acercamiento con los plásticos.

“Si yo quería tener dinero para gastar, tenía que ir a trabajar los veranos. Me alegra que mi abuelo le transmitiera a mi padre, y mi padre a mí, la cultura del esfuerzo... Cuando era muy chico me dejaban jugar a contar las piezas en los almacenes… Después hicimos ‘rebabeo’, acabando piezas, y tuvimos la oportunidad de trabajar en prensas, en las extrusoras, en ese entonces teníamos autoclaves. Y sí queríamos ganar más dinero, nos poníamos a hacer productos a destajo, claro que sin afectar la dinámica de la producción… así aprendí los procesos desde muy chico”, recuerda Nava con una gran sonrisa.

“Posteriormente me atrajo el tema de la computación. Mi papá llevó a la casa una computadora Apple y me dijo: ‘Está bien que te guste jugar, pero también tienes que aprender a programar’. Él me motivó a conocer más sobre computación, y eso me permitió apoyarlo posteriormente con las primeras computadoras que se empezaban a usar en los procesos administrativos de la empresa… Estudiaba y trabajaba al mismo tiempo. Tenía en mi responsabilidad algunas líneas de producción. Mi padre siempre nos inculcó la cultura del esfuerzo, que se resume como: si quieres tener algo, debes trabajar por ello. Y a su vez me transmitió todo el know-how del negocio (…) Me tocó ser chofer de reparto, cobrador y lo que se necesitara para apoyar a la empresa.”

Los plásticos, siempre presentes

En cierto sentido, los distintos plásticos con los que “convivió” Arturo Nava ilustran la evolución que Elastómeros de Querétaro experimentó como compañía, las industrias que atendió, y la propia industria del plástico:

“El primer emprendedor fue mi abuelo y en ese entonces fabricaba materiales eléctricos. Usaban baquelita —el primer plástico comercial completamente sintético—, que es un termofijo. Se hacían series de Navidad, vajillas, etc. También se trabajaban partes de caucho o hule, se hacían mangueras y todos los materiales usados en el mercado eléctrico. Posteriormente, mi padre continuó con el proyecto y el enfoque que le dio fue más hacia la parte industrial para diferentes sectores.

“Cuando mi padre me pasó la responsabilidad para continuar a la cabeza de la empresa, una de las actividades que inicié fue la incursión en la industria aeroespacial. Empezamos con las preparaciones, las certificaciones desde 2014, y con el empuje de la industria aeroespacial retomamos el tema de los plásticos… Es decir, retomamos materias primas y, en este caso, plásticos de ingeniería: el ULTEM, PEEK y Radel, entre otros.”

Ahora, con la industria de Oil & Gas que impulsan, de nuevo están en el nicho de mercado de los plásticos. “Mantenemos toda nuestra gama de productos elastoméricos, como silicones y algunos rubbers. Hemos trabajado en la diversificación y dentro de ese crecimiento está nuestro tool room (cuarto de herramentales), nuestro taller para fabricar nuestros moldes, dados, herramentales, para crecer al ritmo que nuestros clientes y nuestros proyectos van pidiendo y no generar cuellos de botella (…) Entonces, gracias a la industria aeroespacial retomamos lo que en un inicio teníamos muy marcado: el tema de los plásticos”.

Un aprendizaje que nunca termina

A lo largo de su formación, Arturo Nava ha tenido diversos mentores, entre los que destacan su padre, Arturo Nava Bolaños, su “principal maestro en el tema de la industria en general”; el ingeniero José Francisco Ramírez, director general de Tremec en Querétaro, quien lo formó en manufactura esbelta, y el consultor en materia aeroespacial Tudor Pietraru, presidente de Aeroconsultek, donde lo apoyaron en distintos programas para el desarrollo de proveedores: uno impulsado por MABE y SEDESU, y otro diseñado para apoyar a nuevas empresas proveedoras del sector aeroespacial, apoyado por ProMéxico y PROCEI de Europa.

Como reconoce Arturo Nava, en los tres casos, las experiencias y aprendizajes obtenidos de sus maestros marcaron e influyeron en la visión que hoy tiene de su industria, y que a su vez ha encontrado eco en el Clúster de Plásticos de Querétaro. 

“Conocer y llevar la Cultura Lean a la empresa se volvió un parteaguas. Fue un giro muy importante para mí, no solo el enfocarnos en los procesos, sino transformarlos a través de la mejora continua y con la participación de la gente. Me dejó una profunda huella en el cómo hacer y cómo transformar nuestra empresa.

“Con respecto al sector aeroespacial, aprendimos muchísimo. Puedo decir que tardamos mucho tiempo en tener nuestras primeras piezas, pero todo ese esfuerzo y aprendizaje lo capitalizamos con otros clientes en otros sectores y aplicaciones, hasta que logramos tener las primeras piezas que estarían arriba de un avión… Y desde ahí, todo corrió ‘como hilo de media’. Empezamos a crecer y crecer, y gracias a Dios, salvo durante la pandemia, cuando todo fue muy lento, seguimos con muchos proyectos, entregas y nuevos desarrollos. Creo que son hitos muy importantes.”

Reflexivo, Arturo Nava reconoce también que buena parte del aprendizaje profesional y personal se obtiene como resultado del “fracaso”, y de atreverse a innovar y salir de la zona de confort.

“Creo que las lecciones se dan todos los días. A veces aprendemos más de los errores, de los fracasos y de cosas que no nos gustan, pero está en nosotros transformarlas en algo positivo y reconocer lo que pudimos haber hecho mejor o dónde podemos capacitarnos más”.

“Para nosotros, el recurso humano es lo más importante. Los fierros son fierros y quienes hacen que funcionen son las personas. El capital humano hace que las cosas sucedan… Confiar en mi equipo hace que ahora mismo esté dando esta entrevista, mientras que los 250 empleados de las dos plantas hacen que las cosas funcionen. No tengo que estar pegado a ellos o a las máquinas… Creo que esta parte es muy importante para el crecimiento de los emprendimientos: aprender de los errores. Y como le digo a mi equipo: ‘No pasa nada, te equivocaste. Lo que vale es aprender de los errores’. Es decir, no nos vamos a tropezar con la misma piedra.

“Por otra parte, limitar la creatividad por no intentar cosas diferentes, por no innovar, es un error. Solo debemos calcular el riesgo de que salga bien o de que salga mal. Si sale bien, todos aprendemos y le damos una vuelta a la mejora continua; y si sale mal, de cualquier modo aprendemos, porque vamos a encontrar una forma diferente para obtener el resultado que estamos buscando”.

Con respecto a los logros de los cuales se siente más orgulloso en su trayectoria con los plásticos, Nava menciona, sin dudarlo, la certificación aeroespacial obtenida por Elastómeros de Querétaro, también su primer ISO, el cumplir con los requerimientos del ATS por parte de la industria automotriz, y la implementación de la filosofía de la manufactura Lean en su empresa.

Trabajo en equipo y corresponsabilidad

En relación con los cambios que la industria del plástico en México ha experimentado durante los últimos años, Arturo Nava apunta que se trata de un cambio forzoso, pero necesario, que demanda el trabajo en equipo de todos los actores de la industria.

“Tenemos que reenfocar. No podemos quedarnos en el espíritu de decir: yo solo transformo o yo solo fabrico resinas. El reto radica en que la sustentabilidad se logre, se viva. Que no quede en la teoría, sino que se lleve a la práctica. Todos, sin importar de qué nos ocupemos, debemos tomar responsabilidades… En la industria debemos ser muy conscientes del medioambiente, de los recursos que tenemos y saber usar nuestro plástico en forma razonable y no indiscriminada”.

“Pienso que si somos parte del problema, también somos parte de la solución. Si no queremos que nuestra industria sea catalogada con una visión negativa, está en nosotros cambiarlo y lograr que las bondades del plástico y sus fortalezas sean aprovechadas y no terminen en un relleno sanitario”.

El deseo y satisfacción de aportar

Desde septiembre de 2021, Arturo Nava Guerrero se desempeña como presidente del Clúster de Plásticos de Querétaro, uno de los pocos organismos de este tipo en la República Mexicana en tener un enfoque transversal, ya que reúne a 35 socios que están en el área de plásticos, sin importar el polímero que manejen, además de los reciclados o que tengan herramentales, moldes y troqueles. Su singularidad radica en que la mayoría provee a diversas industrias: electrodomésticos, automotriz o aeroespacial, entre otras.

Como lo cuenta, desde esta posición, Arturo Nava Guerrero tiene la oportunidad de seguir de cerca los desafíos y necesidades de la industria del plástico, y de aportar su experiencia para impulsar al sector y a la industria en la entidad.

“Cuando me llegó esta oportunidad, tuve que reflexionar porque en la empresa tenemos muchos desafíos, planes de crecimiento y mucho por hacer. Sin embargo, creo que no podemos quedarnos cruzados de brazos… Es necesario que todos estemos dispuestos a sumar y a dejar nuestro granito de arena. La realidad es que el clúster nos ayuda a todos. En mi caso, no solo a mí como persona o a la empresa que represento, sino a toda la comunidad”.

“Según el plan estatal de desarrollo, el Clúster de Plásticos es estratégico por la generación de empleos y de empresas relacionadas con el sector. El clúster representa una manera de apoyarnos como equipo, de preocuparnos por nuestra sociedad y por el medioambiente. Es el foro ideal para hacer cosas diferentes y no estar solos o aislados como empresas. Podemos potenciar lo que cada uno hace… Lo que llamó mi atención fue precisamente eso, poder dejar algo y hacer algo más por mi estado y por mi país… Lo único que hago es encabezarlo o impulsarlo, pero la fuerza es de todos los que estamos en la industria”.

Dejando una huella positiva

Y es que la importante labor realizada por el Clúster de Plásticos de Querétaro desde su formación en 2016, lo ha llevado a convertirse en el tercer clúster en importancia del estado. “La fuerza, el impacto laboral y económico que tenemos son muy grandes. Disponemos de una gran influencia y es muy importante dejar una huella positiva…”

Sobre los desafíos que su empresa y los socios del clúster enfrentan, Arturo Nava Guerrero se muestra optimista: “Recibimos este año con desafíos. Desafíos en temas de materias primas, de logística, y la pandemia generó problemas de falta de personal, paros en algunas celdas de producción, reubicación de personas, pero parece que todo empieza a mejorar y que tendremos un segundo semestre más fuerte”.

Finalmente, en cuanto a la agenda del clúster, Nava señala que la educación dual y la economía circular figuran como temas centrales para impulsar durante 2022:

“La educación dual es un tema que vamos a tratar con nuestra gente y con nuestros asociados. Hablamos de educación dual desde y para el trabajo, para tener gente que logre terminar su ‘prepa’ e ingenierías. Vamos a procurar programas activos en todos los sectores y eso hará una gran diferencia”.

“Vamos a trabajar con los asociados en otros temas, como la economía circular y en cómo ser más eficientes, es decir, trabajar en la reducción de costos. Traemos para ello un comité de excelencia operacional… Esto ilustra cómo podemos ayudarnos entre todos para tener mejores resultados con herramientas compartidas… Tenemos muchos proyectos y estamos listos para implementarlos”.