“La imagen de los plásticos debe mejorar”: Stefan Engleder, CEO de Engel

Dr. Engleder, ¿qué opciones tiene un fabricante de máquinas de moldeo por inyección para reducir la huella de CO2?

Como empresa de ingeniería mecánica, comenzamos reduciendo la huella de CO2 dentro de nuestra propia empresa. Esto significa, por ejemplo, que compramos electricidad verde, instalamos sistemas fotovoltaicos y reducimos la proporción de combustibles fósiles.

Nuestra estrategia de sostenibilidad tiene como objetivo hacer que la producción sea lo más climáticamente neutra posible en todas nuestras sedes en todo el mundo. Además, vigilamos la producción de nuestros clientes y reducimos continuamente la huella de CO2 de nuestros productos, maquinaria para el moldeo por inyección. Las tecnologías de accionamiento muy eficientes ya han llevado a que sus necesidades energéticas se reduzcan a la mitad.

Los procesos optimizados y las soluciones de control de temperatura adaptadas a la aplicación pueden reducir aún más los requisitos de energía. También utilizamos la digitalización, como los sistemas de asistencia. Sin embargo, para la protección del clima, no solo es importante contar con máquinas nuevas y eficientes, sino que es igualmente importante la reconversión de la base instalada, por ejemplo, con soluciones de reequipamiento o sistemas de asistencia que también se pueden actualizar.

Hay que actuar con mayor rapidez en este ámbito, ya que una máquina de moldeo por inyección puede durar 20 años o más.

Ante los problemas actuales, como la guerra y los altos precios de la energía, muchos temen que la protección del clima y también la economía circular desaparezcan de la agenda. ¿Cuál es su opinión al respecto?

El tema principal en este momento es ciertamente ahorrar energía porque la energía es escasa y costosa, pero en última instancia, este desarrollo también sirve al objetivo de reducción de CO2. Nuestros clientes se fijan cada vez más en el costo total de propiedad, y la energía tiene aquí un papel decisivo, tanto en el consumo de la máquina como en la materia prima.

La atención sigue centrándose en la economía circular, aunque quizás se hable menos de ese tema en este momento en vista de las diversas crisis. Cerrar el ciclo del material reutilizable es un esfuerzo que se extenderá durante años, y gran parte del trabajo se sigue haciendo en Europa. En otras partes del mundo, en Asia o en los Estados Unidos, no se está impulsando con la misma intensidad. Sin embargo, la economía circular está en marcha.

¿Será esto más una desventaja o una ventaja competitiva para la industria europea del plástico?

Si podemos gestionar la economía circular de tal manera que sea ecológica y económica, será una ventaja competitiva, además, si además trabajamos de forma eficiente en el uso de los recursos, también estaremos pagando menos por las materias primas y la energía.

Quizás ese no sea así al principio, cuando toda la operación aún no es escalable, pero a medio y largo plazo será más barata. Lo importante es que la política europea, en particular, establezca los objetivos correctos y alcanzables y los persiga de manera coherente. Sin embargo, si todos hacemos lo correcto juntos, estoy seguro de que la economía circular aportará ventajas para nuestra industria sobre la competencia internacional.

La digitalización es una herramienta en varios procesos. ¿Qué tan grande es su beneficio para Engel?

La digitalización nos ayuda en dos niveles. Por un lado, directamente en relación con las máquinas: sistemas de asistencia de palabras clave. Estos son cada vez más importantes, también porque la falta de personal es cada vez más evidente; ya tenemos una enorme escasez de operarios de máquinas capacitados.

Los sistemas de asistencia digital permiten que las máquinas funcionen de forma relativamente autónoma y también se optimicen a sí mismas. Por lo tanto, las máquinas son cada vez más fáciles de operar. La falta de personal es un tema que todavía no se está discutiendo tanto como el tema de las emisiones de carbono, pero que cambiará en los próximos años, y en la mayor parte del mundo.

La digitalización también ayuda a conectar horizontalmente las partes individuales de la cadena de valor. El procesamiento de plásticos es un proceso muy especializado con muchas etapas diferentes en la cadena de valor. Tiene sentido y también es necesario para una economía circular utilizar datos comunes y establecer interfaces comunes. Esto comienza con el reciclador, que prepara el material, y continúa a través de los productores y productores de empaques hasta llegar a los vendedores y consumidores.

Sin embargo, a muchas partes les resulta difícil intercambiar información...

Eso sucede ahora, y la tendencia hacia el desacoplamiento, como consecuencia de la pandemia del COVID, lo ha hecho aún más difícil. Sin embargo, el intercambio horizontal es posible si se aborda de una manera sensata. Se deben evitar las fugas de datos y solo deben intercambiarse los datos pertinentes. Esto ya está funcionando bastante bien. También ayuda que los grandes fabricantes de bienes de consumo están ejerciendo presión sobre toda la cadena de producción porque ellos mismos están bajo presión pública.

En particular, porque los envases contribuyen significativamente a la mala imagen del plástico...

Sí, el plástico no tiene una buena imagen, pero cuanta más gente se involucra en este campo, más se dan cuenta de sus ventajas, como que los empaques hacen que los alimentos duren más y, por lo tanto, se desechen menos, o que el plástico permite una construcción ligera, lo que a su vez contribuye a la reducción de CO2.

Mirándolo desde una perspectiva autocrítica, hay que decir – y aquí vuelvo al tema de la economía circular – que la industria del plástico aún no ha logrado cerrar los ciclos para todos los materiales. Esa es su tarea más importante en la que estamos trabajando intensamente, y esto es algo que comunicamos, ya que es la única forma en que podemos corregir la imagen que la gente tiene de los plásticos y de la industria del plástico. También es necesario que nuestra industria contrate empleados bien capacitados.