México: camino a ser una potencia en fabricación de inyectoras

A comienzos de mayo fue noticia el anuncio realizado por Engel, reconocida compañía austriaca que fabrica sistemas completos de moldeo por inyección, de una inversión por 30 millones de euros para una nueva planta en Querétaro, México, como parte de su estrategia de expansión en América.

Siguiendo su filosofía “Cerca del cliente”, la empresa busca establecer una sólida presencia local en Querétaro y comenzar la fabricación de máquinas inyectoras de manera local. Stefan Engleder, CEO del Grupo Engel, señala: “Hemos elegido Querétaro porque es el lugar ideal para encontrar, desarrollar y retener talento”.

La adquisición de un terreno de aproximadamente 70,000 metros cuadrados le permitirá a Engel tener espacio para un crecimiento futuro. Esta expansión beneficiará a los clientes en Estados Unidos, Canadá, México y América del Sur al proporcionarles capacidad y experiencia adicionales.

Producción local de máquinas inyectoras: un cambio estratégico

En entrevista con Plastics Technology México, Vanessa Malena, presidente de Engel Américas, comentó que la compañía empezó la producción de máquinas en su filial de Querétaro desde 2023. De hecho, una máquina totalmente eléctrica e-mac fabricada en suelo mexicano se exhibió en la feria Plastimagen el pasado noviembre, y los envíos de las máquinas a clientes en México ya comenzaron.

Malena informó que la planta de producción en México, la décima de Engel a escala mundial, emplea a más de sesenta personas y que espera duplicar esa cifra para finales de año. En junio se trasladará a unas instalaciones alquiladas, mientras construye una nueva estructura. En un inicio, la planta fabricará dos líneas de máquinas inyectoras, la t-win de dos platinas y la e-mac totalmente eléctrica, según Engleder.

Así mismo, la reconocida marca de origen chino Haitian inició la producción masiva de máquinas de moldeo por inyección en territorio mexicano. La dimensión inicial de la planta, ubicada en Acatlán de Juárez, Jalisco, es de 27,000 metros cuadrados, aunque se espera un rápido crecimiento con la construcción de una nave espejo para proyectar una capacidad instalada que le permitirá alcanzar la fabricación de 1,500 inyectoras al año, que tendrán como destino México, Centroamérica y Suramérica.

Según Xu Biyun, gerente general de Grupo Haitian en México, solo hay otras dos instalaciones similares a la de Acatlán de Juárez en el mundo, fuera de China, dedicadas a la producción de máquinas inyectoras de la marca. Estas plantas se encuentran en Alemania e India. Por lo tanto, la inauguración de una tercera instalación de este tipo en México subraya la relevancia del mercado y de toda la región que pretende abarcar dentro de la estrategia global de la empresa.

En esta misma línea, durante la NPE, la compañía alemana Arburg anunció que por primera vez en sus 101 años de historia apostará por la fabricación de maquinaria fuera de Alemania. Actualmente explora diferentes ubicaciones en Norteamérica, donde México también está en la mira.

Guido Frohnhaus, director de tecnología e ingeniería, comentó que la empresa “internacionaliza su cadena de valor con esta iniciativa. El objetivo es fortalecer el apoyo al cliente, reducir los plazos de entrega y acortar el tiempo de salida al mercado, bajo el enfoque ‘local for local”.

México como punto estratégico para la industria de moldeo por inyección

Según el Banco de México, en 2023, los países de donde México importó máquinas de moldeo por inyección fueron China, por un valor de 165 millones de dólares; Alemania, 134 millones de dólares; Austria, 92.5 millones de dólares; Japón, 78.4 millones de dólares, y Estados Unidos, 43.2 millones de dólares.

Asimismo, las entidades federativas que más importaron este rubro fueron Querétaro con 111 millones de dólares, Nuevo León con 109 millones de dólares, Jalisco con 77.1 millones de dólares, Estado de México con 47.8 millones de dólares y San Luis Potosí con 45.1 millones de dólares.

Estos movimientos son un testimonio de la relevancia creciente de México en la industria global de moldeo por inyección, así como de los beneficios del reshoring y el nearshoring para el país. Con la inversión y el establecimiento de plantas de fabricación locales, no solo se reducirá la dependencia de importaciones, sino que se impulsará la economía y se generarán nuevas oportunidades de empleo y desarrollo tecnológico en nuestra región.